Una antigua leyenda, transmitida durante milenios, habla de la Atlántida: una isla rica, feliz y muy avanzada que se encontraba en algún lugar del Mediterráneo.
Sus habitantes vivieron un largo período de esplendor tecnológico y artístico; también se dice que descubrieron nuevos materiales que utilizaron para fundir metales preciosos y que los hicieron aún más brillantes y brillantes. Estos materiales fueron encontrados bajo tierra, excavados por hábiles mineros con las mejores herramientas del mundo conocido. Las excavaciones duraron cientos de años y la tierra comenzó a ceder, haciéndose cada vez más desmenuzable y húmeda, por lo que el grupo de sacerdotes ancianos, conscientes de los mínimos cambios en las energías de la región, decidieron actuar, invocando bendiciones e intentando congraciarse con los dioses. quimeras, más precisamente tritones y sirenas y parece que todavía sobreviven en las profundidades más escondidas. No se ha encontrado ningún rastro de los habitantes humanos de la Atlántida, pero hasta la fecha se han recuperado al menos una docena de fósiles chimeras, que evidentemente pertenecen a la Caballos anfibios que a lo largo de los siglos han vivido en las profundidades del mar.
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